En Mateo 28, justo antes de que Jesús dejara esta tierra y ascendiera al Padre, se paró en una montaña y envió a sus discípulos con una misión clara. Les dijo: "Id y haced discípulos a todas las naciones...". Creemos que ésta es la misión no sólo de aquellos 12 primeros discípulos, sino de todos los seguidores de Jesús. Cada discípulo está llamado a ser un hacedor de discípulos.
Definición de discípulo
Si nuestra misión como iglesia es hacer discípulos, queremos tener un concepto claro y bíblico de lo que realmente es un discípulo. ¿Qué significa ser "discípulo" de Jesús? Un versículo clave que ha ayudado a nuestra iglesia a formular nuestra definición de discípulo es Mateo 4:19, donde Jesús invitó a sus primeros discípulos a seguirle. Les dijo: "Seguidme y os haré pescadores de hombres".
Basándonos en ese versículo, así es como definimos lo que significa ser discípulo:
"Un discípulo es aquel que conoce y sigue a Jesús, se va pareciendo cada vez más a Jesús, y lleva a los perdidos y salvados más cerca de Jesús".
Hay tres partes en esa definición, y cada una de ellas es muy importante:
1) Un discípulo "conoce y sigue a Jesús"-todo comienza con una relación íntima con Jesús. Un verdadero discípulo genuinamente quiere seguir a Jesús en el camino de la vida.
2) Un discípulo "se está pareciendo más a Jesús"-¡esa decisión inicial de confiar en Cristo es sólo el comienzo! Un discípulo genuino estará creciendo en su caminar con Jesús cada día.
3) Un discípulo "lleva a los perdidos y a los salvados más cerca de Jesús"-¡no podemos realmente estar siguiendo a Jesús si no estamos pescando hombres, porque eso es lo que Jesús está haciendo en el mundo! Un discípulo genuino desea compartir con los perdidos e invertir en los salvados para que todos los que encuentren se acerquen a Jesús.